Día 25 (94) - Gn 31:1-9
Y oía Jacob las palabras de los hijos de Labán, que decían: Jacob ha tomado todo lo que era de nuestro padre, y de lo que era de nuestro padre ha adquirido toda esta riqueza. 2 Miraba también Jacob el semblante de Labán, y veía que no era para con él como había sido antes. 3 También Jehová dijo a Jacob: Vuélvete a la tierra de tus padres, y a tu parentela, y yo estaré contigo. 4 Envió, pues, Jacob, y llamó a Raquel y a Lea al campo donde estaban sus ovejas, 5 y les dijo: Veo que el semblante de vuestro padre no es para conmigo como era antes; mas el Dios de mi padre ha estado conmigo. 6 Vosotras sabéis que con todas mis fuerzas he servido a vuestro padre; 7 y vuestro padre me ha engañado, y me ha cambiado el salario diez veces; pero Dios no le ha permitido que me hiciese mal. 8 Si él decía así: Los pintados serán tu salario, entonces todas las ovejas parían pintados; y si decía así: Los listados serán tu salario; entonces todas las ovejas parían listados. 9 Así quitó Dios el ganado de vuestro padre, y me lo dio a mí. Génesis 31:1-9
Ayer vimos como Jacob seguía haciendo las cosas a su manera. Cómo hasta aprovechaba las capacidades que Dios le dio para hacer engaño. Vimos que él iba creciendo en riquezas, mientras que Labán iba cada vez a menos.
El pasaje de hoy comienza con la desconfianza de los hijos de Labán. Ellos tenían experiencia, de toda la vida siendo pastores, y se daban cuenta que no podía ser semejante diferencia entre ellos y Jacob. Dios podía hacer esa diferencia, pues ya lo había hecho con Isaac, cuando sus ganados crecían y la de los filisteos decrecían. Pero en éste caso había conocimiento de como era Jacob.
Pero en medio de esa desconfianza aparece la voz de Dios. Ayer vimos que Dios había cumplido con las primeras tres cosas de la promesa y solo faltaba la de volver a la casa, en Canaán. Pero También vimos que Jacob no había hecho nada de su parte. Ahora Dios le dijo a Jacob que vuelva a su tierra y a su parentela. ¿Te acordás que le pidió al abuelo de Jacob, Abraham? Que deje a su tierra y a su parentela. ¡Justo al revés! La razón era porque Jacob al engañar a su padre y hermano y huir estaba justamente actuando al revés de la voluntad de Dios.
Veinte años habían pasado del momento de la huida y ahora había que corregir las cosas. Dios ahora estaba esperando que Jacob se decidiera a hacer las cosas al estilo de Dios y no al estilo Jacob. Pero no iba a ser tan sencillo.
Jacob manda a llamar a Lea y Raquel. No deseo ser malo con Jacob, pero tratando de ser lo más objetivo posible ¿Para que las llamó? No veo que sea una constante en las decisiones de él. Pero en este momento las necesitaba. En su cabeza estaba lo que Dios había pedido, pero en vez de buscar Su guía, se puso a pensar en como podría hacer para irse de Harán. El engañador había sido engañado, y luego el engañador engañado había engañado a Labán. Tenía que hacer un plan brillante para salir de ahí. Otra vez empieza a obrar en estilo Jacob y no en modo Dios.
Les empieza a hablar a ambas y le dice que su padre lo había engañado, pero menos mal que “el Dios de su padre” había estado “con él”. Aquí también apoyo mi crítica (entiéndase crítica en el buen término y no como muchos creen que es hablar mal de alguien) Siempre habla en primera persona. Nunca piensa que todo era para la familia o el bien de la familia y habla del Dios de mi padre, y no de mi Dios. (el voto que había hecho en Betel decía que Jehová será mi Dios)
Cuando gano algo en mi trabajo, Dios no lo hace solo para mi, sino para mi familia. Les dice que él había trabajado con todas sus fuerzas como ellas lo vieron, pero separado por un punto y coma en el texto, sigue diciendo que Labán le había cambiado 10 veces el salario. Eso puede dejar la idea de que eso no lo vieron. Además... ¿En que momento fue? ¿Es una referencia al engaño del casamiento? Al menos no encontramos eso en el relato bíblico. Lo curioso es que sigue hablando del tema de las ovejas manchadas, que ya hemos visto como él manipuló para salir beneficiado deshonestamente. Por eso me despierta la duda si eso alguna vez pasó. Labán era muy hábil en los negocios, aparentemente. (entiéndase hábil en el sentido negativo) Pero si lo de las manchadas tiene que ver con el comienzo de los seis años y antes trabajó 14 años por Raquel, no encuentro el momento en que eso pasó.
Jacob dice que cuando Labán le cambiaba la orden sobre el tipo de animal de su pertenencia, Dios también los cambiaba y siempre ganaba él, "gracias a Dios". Sé que no es una lectura simple los capítulos 30 y 31, pero tengo la impresión que reiteradas veces usa el nombre de Dios para convencer a alguien de sus argumentos, y su fin es alcanzar sus propósitos.
Si lo tomamos ligeramente, podríamos caer en el error de que Dios ante ciertas situaciones hace la vista gorda. (Vista gorda es una frase que se utiliza para decir que en alguna cuestión se ha pasado por alto, fingiendo que todo está bien, simulando no ver posibles problemas) Pero eso no está en la persona de Dios. Es importante volver al punto de que Dios tenía promesas que cumplir, pero que no estaba de acuerdo con la conducta de Jacob. Mañana seguramente el texto bíblico nos llevará a tratar de entender mejor este concepto.
Pero hoy deseo terminar con esta reflexión. Venimos viendo la conducta de Jacob y su prosperidad. ¿Cómo está tu vida hoy? ¿Es próspera? ¿Por qué? Debemos entender, como ya lo hemos visto, que Dios tiene que hacer que lo que se siembra se cosecha.
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Si hoy Dios haría que todo lo que sembraste en tu vida se empiece a cosechar ¿Qué crees que cosecharías? Puedes usar otra hoja de papel y empezar a enumerar todos los días lo que vas descubriendo positivo y negativo.