Día 22 (136) - Gn 41:54-57
54 Y comenzaron a venir los siete años del hambre, como José había dicho; y hubo hambre en todos los países, mas en toda la tierra de Egipto había pan. 55 Cuando se sintió el hambre en toda la tierra de Egipto, el pueblo clamó a Faraón por pan. Y dijo Faraón a todos los egipcios: Id a José, y haced lo que él os dijere. 56 Y el hambre estaba por toda la extensión del país. Entonces abrió José todo granero donde había, y vendía a los egipcios; porque había crecido el hambre en la tierra de Egipto. 57 Y de toda la tierra venían a Egipto para comprar de José, porque por toda la tierra había crecido el hambre. Génesis 41:54-57
El día de ayer quedamos en los 7 años de abundancia que hubieron en Egipto, tal cual Dios le había declarado al Faraón en el sueño que José le explicó, guiado por Dios. Durante esos años José había dirigido todo el plan de trabajo que consistía en aprovechar los recursos naturales al máximo para poder acumular la mayor cantidad posible de granos para los siete años de hambre que venían a continuación.
Vimos que mandó a quintar toda la tierra de Egipto. Para poder hacer eso posible, ya que mucha tierra es muy difícil para la agricultura en aquel lugar, tuvo que abrir canales por todos los lados. Sabemos que el río que baña esas tierras suele subir de nivel unas cuatro veces al año. Cuando eso sucede las aguas inundan las costas y dejan un sedimento muy bueno que fertiliza la tierra. Al hacer canales, esas subidas de nivel del agua llegaban a más territorio y se aprovechaba más para la siembra. Otra de las cosas que hizo fue construir los lugares de almacenamiento. Para no perder tiempo en el traslado de grano, sino invertirlo en la siembra y la cosecha, hizo construir graneros cerca de cada ciudad. Y a medida que se iba cosechando, se iba guardando en esos lugares cercanos al lugar de la cosecha. Así acumuló tanto, que no se podía contar más, pues no había números para hacerlo.
Y durante esos años de abundancia, con su esposa Asenat, tuvieron dos hijos: Manasés y Efraín.
El pasaje de hoy comienza a contar sobre los 7 años de hambre. Es importante destacar que la Biblia dice que había hambre en todos los países. Muchas veces la Biblia habla de algún tiempo de hambre en cierta región, sin aclarar cuanto abarca. Pero en éste caso menciona que alcanzó a todos los países, es decir, a toda la tierra. En notable que en poco tiempo todo el mundo se quedó sin comida, excepto Egipto, ahí había pan. ¡Qué importante había sido el poder escuchar la voz de Dios! ¡Qué importante fue el creer en ésa voz y llevar a cabo la difícil tarea que se hizo durante los primeros 7 años! Aunque no sería menor tarea la de repartir de tal manera que todos tuvieran lo necesario durante los últimos 7 años. Imaginate cuando todo el mundo de aquel entonces empezó a tener hambre e iban a Egipto en busca de comida. Se podían haber preguntado: ¿Cómo sabían ellos que guardaron toda esa comida?
Al poco tiempo los hogares de Egipto también se quedaron sin comida y fueron a ver al Faraón. El Faraón les dijo que tenían que hacer dos cosas para que no pasaran hambre: Ir a José y hacer lo que él les mande. ¡Qué confianza tenía Faraón en José! ¿Te diste cuenta que Faraón no lo tomó como un negocio político? No dijo yo les voy a dar todo lo que necesiten, y llamó a José y le dijo que les dé de comer. No, no fue así. Los mandó a que vayan a José y que hagan lo que José les diga, es decir, no se amotinen, no hagan saqueos, no se desesperen, José va a hacer todo lo que ustedes necesiten. ¿Por qué no hay políticos así hoy? Porque no hacen como Faraón, lamentablemente hay un peso político que siempre inclina la balanza. Pero igualmente es nuestra responsabilidad orar por nuestras autoridades.
Pero hay una lección más. Lo importante de ir a Dios, y hacer lo que Él nos manda. En San Juan 15 podemos leer las palabras de Jesús: “ 14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. 15 Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. 16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. 17 Esto os mando: Que os améis unos a otros.” Otra vez vemos en la vida de José el reflejo de lo que se iba a escribir 1700 años después. Dios le daba a conocer sus planes, pues hacía lo que Dios le mandaba y por eso era amigo de Dios. (Aunque la Biblia no lo mencione así)
En medio de la necesidad debemos IR a Dios y OBEDECER lo que Él nos dice. Y Él tendrá cuidado de nosotros.
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¿Has ido ya a Dios? ¿Obedeces lo que Él te dice en su Palabra?