Día 36

¡Hola! Bienvenido a la serie “Os ha nacido”, día 36.

Ayer quedamos cuando los magos entregaron los 3 regalos al niño Jesús en la casa donde estaba junto a sus padres.

Antes de estar allí habían estado en el palacio del rey Herodes, y él les había dicho que quería saber donde estaba el niño, por lo tanto les pidió que le avisen donde estaba para ir a adorarlo.

El ángel del Señor iba a intervenir en más de una vez, pues ya se empezaba a cumplir, de a poco, lo que se había profetizado de diferentes maneras, de como iba a ser combatida la venida de Dios en humanidad.

Aquellos magos, después de varios meses de camino, y habiendo cumplido con el deseo de adorar al rey de los judíos, esa noche habrán descansado como nunca antes. Todo lo vivido en todo ese tiempo, pero aun más en ese último día habría impactado extraordinariamente su corazón. Justamente en esa disposición del corazón es donde Dios habla.

Muchas veces parece, en nuestra vida, de que Dios no nos tuviese en cuenta, o que no sentimos su obrar en nosotros, y justamente ahí debe impactar las palabras de Jesús: Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. Lucas 12:34

Esa es la clave. Aquellos magos habían puesto sus tesoros a los pies de Jesús. Todo lo más valioso pusieron delante de Él, y Jesús pasaba a ser lo más valioso para ellos. Esa es la clave para que Dios pueda actuar con todo el poder que tiene en nuestra vida y además podamos escuchar su voz con total claridad.

En medio de ese descanso tan especial para ellos, después de ese día inolvidable de verdad, es donde el ángel del Señor les comunica algo muy importante. No importa a cual de ellos le habla, por eso no lo dice, pero si que el mensaje era avisarle que no debían volver al palacio de Herodes. Herodes no había entendido, dentro de su egoísmo, de su enorme ego, de su pensamiento lleno de poder viciado de mal, que el Cristo es el enviado del Dios de los cielos, el Todopoderoso, el que todo lo sabe.

Entonces aquellos magos, buscaron otro camino para volver. No nos indica que habría una estrella para ser de guía de regreso, pero obedientes a la voz de Dios por medio del ángel, volvieron sin pasar por Jerusalén. Y ya no tenemos más información de ellos.

Como cada historia que está en la Biblia, Dios ha querido que ahí esté para que podamos entender quién es Él y que espera de cada uno de nosotros. No importa cual sean nuestros antecedentes ni de donde vengamos, Dios puede hacer que podamos experimentar lo más hermoso que a un ser humano le pueda suceder, tener un encuentro personal con Jesús, y poder ser perdonado y salvo para siempre.

Pero el ángel no tuvo que dar solo un aviso a los magos, sino que fue también en sueños a José. Le dijo que rápidamente tome a María y al niño y huya para Egipto, y que se quedaran allí hasta que él el diga.

Nuevamente nos ponemos en los zapatos o sandalias de José. Todo lo que había vivido en los últimos 2 años era increíble, las formas en que Dios mostró que estaba en aquel niño, pero ahora le dice que huya. ¿No podía Dios destruir de una a Herodes? Pues el mensaje del ángel fue que Herodes iba a buscar a Jesús para matarlo. Si Dios había puesto una columna de fuego entre su pueblo y el ejército de Faraón, y luego abrió el mar rojo para que pasen en seco, ¿Qué no podría hacer para frenar a Herodes? Esa podría ser una forma de ver lo que estaba pasando.

Pero hay otra forma… que es pensar, que el Dios Todopoderoso que podría hacer cualquier cosa para detener a Herodes y proteger a su Hijo Jesús, le estaba pidiendo a él que lo haga. ¿Quién soy yo para poder hacer semejante cosa? ¿Tres personas con tan pocos recursos huyendo de un rey con tanto poder amparado por el imperio más duro que ha existido? ¡¡¡Qué honor tan inmenso que Dios nos da cuando pone en nuestras manos algo tan importante, confiando en que nosotros responderemos con fe a su pedido y dejaremos que él obre a través de nosotros!!

Ante cualquier desafío de la vida en Cristo que se presente podemos pensar de la primera manera o la segunda. ¿Cómo cual piensas tú? ¿Cual de ellas se identifica con tu forma de actuar? ¿Juzgas la forma en que Dios obra o te pones de rodillas delante de él agradeciéndole que te hace sentir útil para él y te ayuda a descubrir el verdadero sentido de tu vida?

En su humanidad José tenía muchas cosas para poner a debatir cual de las dos elegir, y posiblemente cada uno de nosotros también las tengamos, pero no se detuvo, ni esperó a que amanezca, sino que enseguida se despertó, y tomó a María y al niño y salió rápidamente hacia Egipto, como se le fue solicitado.

Muchas veces en la Biblia vemos que lo que más agrada a Dios es la obediencia, aun más allá de los sacrificios. Por eso Dios eligió a José, pues sabía que él tenía su corazón dispuesto a escuchar y obecederle. El mensaje de Dios no lo recibió en persona como María, sino siempre en sueños, pero no perdió el tiempo en pensar cual de las dos formas de pensar sería la suya, sino que habrá apreciado de que Dios le concedía el privilegio de servirle para que el plan de Salvación para la humanidad se llevara a cabo.

De la misma manera Dios desea usar a cada uno de nosotros para que el plan de salvación pueda llegar a todos los que nos rodean.


¿Oramos?

Querido Padre Dios, gracias por tu plan maravilloso de salvación. Gracias porque utilizaste y utilizas a personas para llevarlo a cabo, aunque solo Cristo pudo entregar su vida por todos, pues él solo es el Cordero Perfecto. Ayúdanos a entender que nuestra vida tiene que estar dispuesta a escuchar tu voz y obedecer, y que tú deseas ser nuestro tesoro, así como nosotros somos tu especial tesoro. Te alabo y adoro, en el nombre del Señor Jesús, Amén.