26 de marzo
Un misterio llamado Jesús
¡Hola! En nuestro país, comenzamos ayer la semana de estudios pues el lunes fue el feriado nacional que recuerda los acontecimientos comenzados el 24 de marzo de 1976 donde se llevó a cabo un golpe de estado. Ese día las fuerzas armadas tomaron el poder de la nación, derrocando a la que fue la primera presidente del país. En ese tiempo nuestra Argentina estaba hundida en una ola de violencia de la cual muy poco se habla hoy en día, pero aquellos que estuvimos ahí sabemos lo que era ir a la escuela sin saber que podía pasar en la calle, pues era diario que haya tiroteos o bombas puestas en diferentes lugares por grupos extremistas. Claro que hacía falta poner en orden todas las cosas, pues no se podía vivir de esa manera, pero lamentablemente, las fuerzas armadas no eligieron el mejor camino, sino que fueron parte primaria del peor momento de tristeza por la muerte y desaparición de miles y miles de personas.
¿Podríamos decir que es un misterio como los seres humanos se ponen de acuerdo para hacer el mal? ¿Es el deseo de poder el que lleva a muchos a unirse y atentar contra otros? Lamentablemente no son muchos los que buscan la verdad, o que indagan en ella, como vimos que Jesús hacía a sus doce años, sino que llevados por diferentes ideologías políticas o religiosas, son convencidos para “luchar” por un ideal. ¿Sabías que ideal originalmente significaba que solo estaba en las ideas, en la mente, y no en la realidad?
Muchas veces se usan los ámbitos educacionales para introducir a los jóvenes a esas ideas. El ámbito que debe ser usado para capacitar a las personas a ser críticas, a saber tomar sus buenas decisiones, a ser buenos ciudadanos y a prepararse para el mundo del trabajo y su futuro, se puede convertir en un foco de problemas para otros que no estén de acuerdo con esas ideas o pensamientos.
Una de las cosas que el misterio llamado Jesús nos muestra, es que el ser humano ha sido diseñado para otra cosa. No ha sido hecho para el mal.
Luego de la historia vista, María se quedó pensando en qué quiso decir el muchachito Jesús con: en los negocios de mi Padre me es necesario estar. Pero si bien aún no lo entendía completamente, lo guardaba en su corazón. Ahí encontramos una respuesta al mal que muchas veces vemos. El asunto es qué guardamos en el corazón. María decidió guardar lo que Dios le dijo y lo que Jesús le dijo, no lo que la religión, o sociedad o políticos le decían. ¿Qué guardás en tu corazón? Si guardas mal, solo harás el mal, pero si guardas el consejo de Dios, Él te guiará a toda verdad. Así dice la Biblia.
Te invito a orar: Querido Dios Padre, gracias porque todos tus consejos son para mi bien y la de todos los demás, porque son de amor y de paz. Ayúdame a ser como María y guardar en mi corazón todas tus palabras, aunque a veces no las entiendo completamente. En el nombre del Señor Jesús, Amén.
¡HASTA MAÑANA!